Aterrizado en Europa en el año 2006, el atacante argentino Carlos Tévez (32 años) decidió poner el punto y final en nuestro continente a la conclusión de la temporada 2014-2015 e hizo las maletas con destino a Argentina. Con el claro objetivo de estar más cerca de su familia, el Apache concluyó su periplo europeo tras la derrota en Liga de Campeones ante el FC Barcelona. De vuelta a Boca Juniors, el ex futbolista de la Juventus valoró que la mejor opción era pasar la recta final de su carrera en el equipo de su corazón. Pero eso fue antes que los ritos inversores chinos decidieran lo contrario.
Convertido en el nuevo Eldorado de los jugadores que buscan un último gran contrato, el campeonato chino ha puesto sus ojos sobre Carlos Tévez. Concretamente, el Shanghai Shenhua, equipo de Gustavo Poyet que cuenta con Demba Ba, Fredy Guarin y Obafemi Martins. Se trata de un rumor que no ha dudado en responder el presidente xeneize Daniel Angelici, quien señaló que «Carlos no jugará en otro club que no sea Boca. Él decidió volver a Boca y terminar su carrera aquí».
En una dirección contraria apunta el máximo mandatario del club chino Wu Xiaohui a Shenhua News, quien reconoció que ya había conversaciones entre las partes. «Las negociaciones están avanzadas. Esperamos cerrar el acuerdo tan pronto como sea posible. Hemos hecho un gran esfuerzo y se puede decir que se ha producido un acelerón decisivo en las negociaciones, aunque por muchas razones aún no hemos conseguido completar el acuerdo. Boca Juniors también tiene algunos problemas que resolver. Vamos a tratar de dar a nuestros seguidores una sorpresa agradable».
Una agradable sorpresa que también significaría un premio para el delantero argentino. Con contrato con Boca Juniors hasta 2018, Tévez ha recibido una oferta de 40 M€ por temporada, salario con el que doblaría lo ingresado por Cristiano Ronaldo y Lionel Messi. Una cantidad disparatada a la que nadie podría negarse.
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